Hola queridas.
No me pilláis de muy buen humor, no.
Y es que una es tonta...la verdad... no sé porqué no soy rubia: No vuelvo a comprar un roscón de reyes carísimo para las osas patinadoras ni hasta el culo de ácidos. Resultado: para reinas, ellas, y todas pasaron olímpicamente del puto roscón, dando lugar al engorde gratuito de vuestra marquesa. Eso sí, me ha tocado la haba y la figurita - lógicamente - ya que me lo he zampado yo todo. (Aunque con mi mala suerte no me habría extrañado no encontrar la puta figurita ni aún así).
Lo que me recuerda una experiencia similar hace 18 noches de reyes, en lo que en su día era la discoteca-geriátrico Balkis. Ya sabéis que la marquesa no deja ni una miga de todo lo que se le ofrezca GRATIS y sea comestible. Y en la barra pusieron unos cuantos trozos de roscones de reyes. Como supondréis, me lancé a ellos en plan bicho alien-clitoris. Pero queridas, recordad que la gula es mala, y casi me parto los dientes encontrando a bocados la puta canica de cristal. ¡Un premio! Qué maravilla. A saber qué maravilloso regalo habría merececido echar a perder décadas de odontología, mentoneras, brackets y demás. ...me acerco a por él y me entragan un maravilloso ...archivador de tamaño cuartilla de agujeros no estandar de 100 pesetas! Me cago en la puta canica, la discoteca y los tres reyes magos juntos!!! Más me habría valido tragarme la puñetera canica. Desde entonces mastico con más cuidado todo lo que entra en mi boca el día reyes.. por si hay "sorpresa".
1 comentario:
Llamadme bruta, pero despues de haberme comido todo el roscón, no he encontrado la haba. Eso os da una idea de cómo me lo debo de haber comido. La figurita del rey por ahí anda, pero ni rastro de la haba. Estaremos atentas a la marquesil taza del bater.
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