31/12/10

La Marquesa en la Ópera.

Oaghj! Qué mejor sitio para una marquesa que la ópera!!
En mi retina se repiten - rollo loop - las memorables escenas de la Marquesa de Merteuil entrando en su palco reservado de la ópera... altiva, segura... me encanta Glenn Close, pero servidora lo único que comparte con aquélla son quizá las Amistades Peligrosas, y poco más.
Pues precísamente una de estas amistades peligrosas... (y tanto!) (...) y más (...) - fué quien invitó a la Marquesa a desvirgarse en términos operísticos en la Opera House de Monteolivete, invitación que servidora tuvo a bien aceptar en 3 milisegundos arrebatándole las entradas de un zarpazo al grito de "Trae pa'cá chacho, ja me maten por la gloria de mi madre!!"

Manon. No es la mejor representación para estrenarse, pero bueno, aún así llegó a casi emocionarme. (Servidora había leido el argumento y no se dejaba sorprender fácilmente).
Aquello estaba perdidito de señoronas florero con abrigos de pieles. Me daban ganas de vomitar en plan "padre de familia" para conseguir el último cacho de tarta. Pero encima de esas asesinas que lucían pieles de cadáveres. Me da asquito esa gente. Mucho. Me parece a mí que si el palacio de la ópera rebentara en colosal explosión Rita Barberá se quedaba sin amigas y el PP sin la mayoría absoluta...

Al menos ...de camino a casa también pude estrenarme por primera vez en otra cosa: Se la tuve que chupetear y soplar a un guapisimo guardia civil.... !la boquilla del control de alcoholemia, cerdas! El primer control en mis 21 añitos... si. Qué ilusión, y cómo estaba de bueno ese policia. Guardo la boquilla. Y mi boca. Uy, que me vuelvo ordinaria.

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